Acabo de terminar una sesión con un gerente de una empresa a la que estoy asesorando. Estoy escuchando al dueño del negocio y una de las cosas importantes como coach es facilitar ese acompañamiento, sobre todo a las personas de confianza del dueño, no solo a los socios o al empresario. ¿Por qué? Porque puedes estar intentando implementar cambios con el empresario, pero si no involucras a las personas que le brindan el primer nivel de soporte, seguirán practicando lo mismo mientras él intenta crecer.
Cuando te involucras en conversaciones con los gerentes, directores generales y otros roles de soporte directo, a veces intentas hacer esos cambios con los colaboradores directos y ellos los llevan a cabo, pero es el empresario, el director, quien se muestra reacio a cambiar. No es cuestión de que quieran seguir entregando reportes de la misma manera. Estamos implementando algo nuevo y tú también debes contribuir.
A menudo, como dueños de negocio, no nos damos cuenta de que queremos implementar cambios y mejoras, pero nosotros mismos somos los que a veces no permitimos que nuestros empleados cambien, porque no queremos modificar nuestra forma de pensar, ni nuestras prácticas habituales. Si realmente deseas transformar tu negocio, el cambio debe comenzar contigo. Debes estar dispuesto no solo a aceptar la transformación, sino a liderarla activamente.
Por favor, cuando te encuentres en esta situación y quieras que las cosas funcionen, reconoce que también debes cambiar. Es tu negocio, y aunque seas el jefe, si deseas cambiar, como líder debes ser el primero en hacerlo.